¡Qué yegua tan preciosa!

Este lunes tuvimos la gran oportunidad de ver a una yegua de verdad, la yegua de Juan.

¡Qué animal tan impresionante!

 

Pudimos comprobar muchas de las cosas que ya sabíamos:

Que vive en la cuadra porque ya está domada (es doméstica)

Que comen avena, pienso, paja y hierba fresquita (es herbívora),

Que tuvo un potro blanco precioso (es mamífera) que vive ahora en otra cosa con otro dueño,

Que su cabello, las crines, se cortan para las romerías porque sino tiene calor,

Que necesita montura, riendas y otros accesorios para poder montar encima de ella,

Que utiliza cepillos distintos para cuidar su pelo,

Que puede caminar al paso, al trote y al galope,

Y que sabe hacer muchos movimientos que le han enseñado a hacer con sólo indicarle con una pierna o con un toque de rienda.

 

Juan nos contó muchísimas cosas interesantes sobre los cuidados y necesidades de su yegua pero mis niños y niñas no las recuerdan todas porque son todavía muy chiquitos para comprenderlas.

Gracias de todo corazón a Juan por facilitarnos esta experiencia tan inolvidable.

  

Cuando llegamos a clase estuvimos recordando cada una de las cositas que habíamos aprendido y entre todos hicimos una composición de dibujos que le llevaremos a Juan cuando esté terminada.